Si eres de los que gusta viajar mucho y en ocasiones terminas la jornada agotado, debes saber que esto quizás pueda deberse al calzado que empleas en tus travesías, ya que todos no son idóneos para caminar largas distancias o andar todo un día de aquí para allá.
Es cierto que los zapatos clásicos, las botas y las chancletas pueden ser efectivos para determinadas actividades, pero inoperantes para muchas otras, algo que no sucede con otro tipo de calzado, cómodo para muchos escenarios.
Se trata de las zapatillas de deporte, pensadas para hacer deporte pero acomodables a muchas otras actividades que queramos realizar, como la mayor parte de todas las asociadas a los viajes habituales.
Mediante su uso continuo para las largas caminatas citadinas, o para el ir de un lado a otro típico de las salidas turísticas, tendrás muchas posibilidades de no terminar tus días con los pies destrozados y una sensación abrumadora de cansancio (fuente: mochileros).
Beneficios de las zapatillas
Muchos son los aspectos que hacen de las zapatillas de deporte el calzado perfecto para viajar, por encima de muchos otros. A continuación expondremos algunos, que si bien pueden estar en otros zapatos, son reunidos de forma integral por las zapatillas, constituyendo así los principales beneficios para su uso por parte del usuario-viajero.
Amortiguación
Las suelas de las zapatillas de deporte son diseñadas más bajo criterios deportivos y motores, que bajo criterios estéticos, aunque estos no son del todo desechados.
De esta forma, el principio principal que guía su fabricación es conseguir una amortiguación que se adapte a la forma de caminar de cada usuario, de manera que si este suele inclinarse hacia un lado, la suela se comprima más allí, favoreciendo que el pie vaya naturalmente al otro. Esto resulta ideal para repartir el peso sobre el calzado y hacer que el usuario se canse menos.
Por supuesto, hay zapatillas con distintos niveles de amortiguación, acompañados por otros beneficios, pero la adquisición de uno u otro modelo estará en dependencia del presupuesto que se maneje.
Transpiración
Otro beneficio de las zapatillas de deporte es la transpiración, beneficio que incluyen todas en su mayoría, y a mejor precio que los otros muchos zapatos y botas transpirables.
Gracias a la transpiración el portador de unas zapatillas mantiene sus pies más alejados del mal olor, las ampollas o los riesgos de infección que implican unos zapatos no transpirables, hecho que resulta importante para un turista que camina largas distancias durante horas e inevitablemente suda sus pies.
Flexibilidad
El otro gran beneficio de las zapatillas (sólo diremos tres pero la lista podría ser larguísima) es su flexibilidad.
Este elemento permite no sólo que el calzado se adapte a nuestro pie en disímiles escenarios, sino que además disminuye y aleja las probabilidades de esguinces y torceduras, por mucho que se camine.
Sin dudas, estos tres grandes beneficios, sumados a muchos otros, hacen de las zapatillas de deporte un calzado perfecto para llevar siempre en nuestros viajes.
Disponibilidad
Para finalizar, y como otro punto a favor de las zapatillas, podemos hablar de su alta disponibilidad.
Este tipo de calzado no sólo se vende en tiendas deportivas, aunque sí son las que lo presentan en mayor variedad, sino también en grandes almacenes como los Carrefour, en secciones especializadas de peleterías tradicionales y hasta en las tiendas pequeñas de barrio.
Asimismo, podemos adquirirlo vía online, donde encontraremos una mayor variedad que en cualquier otra tienda, a mejores precios y con las mismas garantías que una compra física, a veces más.
Con respecto al precio, si bien es cierto que podemos encontrar zapatillas a 15 euros, lo mejor es destinar para su compra un presupuesto cercano o superior a los 50.
El gasto parecerá poco con respecto a los beneficios y salud para nuestros pies que nos darán estos zapatos, que por todo explicado podemos concluir que constituyen uno de los complementos perfectos para nuestros viajes y travesías.