La isla de Lanzarote cuenta con un gran patrimonio cultural y paisajístico y es por ello que si no se utilizan algunas claves, puede resultar un poco caótico visitarla. Aquí podrás encontrar algunos trucos para no perderte nada.
Prepara el itinerario con antelación
En primer lugar hazte con todos los mapas e información que puedas, pues siempre será mejor saber a donde vas y conocer lo que vas a visitar, para poder apreciarlo mejor. Además, podrás obtener toda esta información de forma gratuita en la oficina de turismo, e incluso te la enviarán a tu casa antes de emprender el viaje si así lo requieres.
En segundo lugar, para aclararte mejor en tu viaje, y si tus días de vacaciones te lo permiten, deberías dividir la isla de alguna manera, para poder visitarla toda. Una gran opción es hacerlo por puntos cardinales: norte, sur, este y oeste. Podrás dedicar a cada uno de ellos un número de días, según las vacaciones de las que dispongas, intentar ver dos zonas en un mismo día o elegir tu zona favorita y dejar las otras para otra ocasión según tu disponibilidad de tiempo.
¿Qué ver en el norte de Lanzarote?
En el norte la principal atracción paisajística y natural que tenéis que visitar es sin duda el Mirador del Río. Este paisaje está compuesto por unos increíbles acantilados de tamaño gigante. Cerca de aquí, podrás visitar los Jameos del Agua, unas especiales cuevas en las que podréis apreciar a los cangrejos blancos, que se encuentran en peligro de extinción. En la misma zona deberéis de visitar también Famara, un bonito pueblo donde se encuentra además el punto más elevado de toda la isla, denominado el Risco de Famara.
Cerca también, podréis visitar la Cueva de los verdes. Se trata de unas bonitas cuevas de origen volcánico en las que podréis dar un paseo guiado para conocerlas bien. Además, por toda esta zona podréis comer bien, degustando un buen pescadito aderezado con un buen vino y acompañado de las tradicionales papas arrugás, famosas en todas las islas canarias.
¿Qué ver en el sur de Lanzarote?
En el día reservado para el sur de la isla podréis disfrutar, y quizá vale la pena dedicarlo, a disfrutar de las playas. En primer lugar no podéis dejar de visitar la Playa del Papagayo. Se trata de un lugar de difícil acceso donde podrás apreciar las playas más bonitas de todo Lanzarote. Una maravillosa agua cristalina te recibirá para pasar un día relajado e inolvidable. En esta zona, también podéis continuar visitando el pueblo Playa Blanca. Si contáis con más días, otra gran opción es coger el ferry para visitar Fuerteventura, o visitar más playas bonitas de las muchas que hay en la isla.
Visitar Puerto del Carmen
En la parte más este de la isla tienes que visitar Puerto del Carmen. A partir de aquí, sería una gran opción acercarte a Teguise si puedes ir un domingo, dónde encontrarás un mercadillo fantástico que seguro te fascinará. En este artículo encontrarás información muy útil para preparar tu visita a Teguise.
Puedes visitar también las diferentes zonas de viñedos y aprovechar tu viaje para degustar sus espectaculares vinos, pues, un dato que probablemente no conocías es que la isla de Lanzarote es un gran productor de vino (malvasía).
Si te apetece, incluso podrás hacer alguna cata en alguna de sus populares viñas. Cerca de esta zona, y con carácter más cultural, también deberías visitar la casa de Saramago y la casa de César Manrique.
Parque nacional de Timanfaya
Y por último, no puedes irte de Lanzarote sin visitar el Parque nacional de Timanfaya. Éste es el volcán de la isla que entró en erupción, dejando un paisaje totalmente lunar o marciano donde podrás realizar una visita e incluso apreciar sus túneles de magma que aún desprendes calor. Podrás incluso dar un paseo en camello por las dunas cercanas. Aquí tienes toda la info que puedes necesitar.